¿Cómo saber si mis gatos se están peleando?
El primer indicio que te puede ayudar a identificar si tus gatos se enojan está en sus orejas ya que las ponen totalmente para atrás y pegadas a la cabeza, otra pista está en los ojos porque los entre cierran para protegerlos, luego puedes analizar si sus lomos están erizados, esto lo hacen para parecer más grandes.Cuando los gatos pelean se dan zarpazos con sus garras expuestas incluso si no golpean al otro, esta acción la usan para marcar su línea de seguridad y advertir al otro gato que si la cruza se llevará un buen golpe. Por otro lado, las vocalizaciones serán más prolongadas y profundas tanto en el momento previo como durante la pelea.
¿Qué hacer si tus gatos pelean?
Entendemos que presenciar una pelea de nuestros gatos es un momento angustiante pero debes hacer lo posible por mantener la calma ¡Nunca debes meter tus manos! En ese instante de la pelea tus gatos están muy enojados y alterados por lo que pueden lastimarte si intentas separarlos, respira profundo y sigue estos pasos.
Asegúrate de que es una verdadera pelea: algunos gatos juegan muy brusco así que fijate bien en la posición de las orejas, sus ojos y muy importante sus garras, si notas que se están generando heridas en la nariz o se arrancan mechones de pelo es momento de actuar.
Haz un ruido fuerte: como te lo mencionamos anteriormente no debes meter tus manos en una pelea de gatos, la mejor opción para llamar su atención es hacer ruido aplaudiendo muy fuerte, dejando caer una bandeja de metallica, estallando una bomba, bolsa de papel o cualquier otra forma que se te ocurra.
Spray de agua: si el ruido fuerte no distrae a tus gatos de la pelea es momento de recurrir a su mayor némesis “el agua''. Llena un atomizador con agua o incluso un juguete de pistola de agua y úsalo solo en caso de emergencia.
Permite que se calmen: una vez logres separarlos no les grites ni los regañes ya que se encuentran agitados y confundidos, deja que descansen, no intentes juntarlos en contra de su voluntad, incluso puedes usar feromonas para ayudar a calmarlos y cuando regresen al estado de calma puedes intentar jugar con ellos siendo tú quien dirija el juego con algún objeto.
A pesar de que es un momento de mucha tensión, debes tratar de mantener la calma en todo momento, así sabrás cómo manejar la situación evitando que se hagan daño entre ellos.