Gracias a su instinto natural, los gatos aprendieron a cazar y a vivir sin compañía, generando que a través de la historia algunos críticos los catalogan como animales fríos y poco afectuosos, siendo esta información totalmente falsa. Si se comparan con los perros, la forma en la que se relacionan con las personas es muy diferente; por un lado, los perros son más complacientes; mientras que los gatos, aceptan la compañía humana en sus propios términos ya que, por lo general, son ellos los que escogen el momento para acercarse.
Otro de los mitos que se han creado alrededor de los gatos, tiene que ver con que no sienten afecto por sus dueños si no hacia su casa y espacios, lo que ha llevado a que muchos propietarios de gatos los abandonen cuando cambian de hogar, esperando que la nueva familia que vivirá en su vieja casa los adopte. Pero, lo cierto es que, aunque son bastante territoriales te necesitan tanto a ti como a su hogar, por lo que si hay un cambio debes darle un poco de tiempo y amor extra mientras logran adaptarse.
En Mirringo resolveremos algunas dudas que tienes acerca de las características o actitudes de nuestros adorados felinos.